Otro añito más que vuelvo a la carga con el que ya se ha convertido en un clásico de mis proyectos. Otro añito más al frente del Llibret de la Falla Cotxera de Torrent. Bueno, de la Associació Cultural Falla Barri Cotxera de Torrent, que cada año tiene un nombre más largo. El año que decida incluirlo tal cual en el Llibret no nos cabrá nada más.
Y digo otro añito más porque ya son unas 4 ediciones en las que me encargo del diseño de la portada del libro, y unas cuantas menos en las que también me encargo del interior. Por cierto, que el Llibret de este año lo tenemos en formato on-line aquí, para todo el que lo quiera leer y lo quiera disfrutar; aunque como siempre, en formato papel siempre es más bonito y sobre todo, más duradero.
Sin embargo, con respecto a la creación de este año ha sido un poco distinto a las demás. Y me explico.
Suelo hacer caso a la vieja tradición llibretera de que la portada tenga relación con el tema de la falla mayor (algo que además es requisito de todo libro), y en todos mis llibrets he intentado explicarme con mayor o menor gracia de qué va a tratar el monumento. Este año la falla mayor trata sobre nuestro barrio, donde está ubicada la falla: el barri de La Cotxera, y va a plantarse bajo el lema «La Falla conta com era el Barri de La Cotxera» (La Falla cuenta cómo era el Barrio de La Cotxera), obra de Juanjo González Juanjo García. La falla habla, obviamente, de nuestro barrio, de su historia y de nuestra historia, de cómo se vivía antes y cómo se sobrevive ahora. Del paso de los años, en definitiva.
He de decir, por si no lo había dicho aún, que ésta es mi falla, y por tanto también es mi barrio. Aquí he pasado toda mi infancia y estoy pasando todo lo que llevo en este perro mundo. Me conozco cada esquina y cada calle, pero no cada vecino (y es que tengo muy mala memoria), aunque soy muy de caras. Vivo en una casa con casi 200 años de historia, y soy el quinto Alberto que vive en las calles de La Cotxera. Como podéis adivinar, se trata de un proyecto muy especial para mí, que va muy arraigado a lo que soy ahora.
Para mostrar toda esta historia del barrio he decidido incluir un elemento característico de mi barrio: la torre de La Torrentina. Este elemento también es el centro del monumento mayor, así que mucho mejor. Se trata de una vieja chimenea que pertenecía a una fábrica de conservas de tomate que estaba ubicada donde hoy hay unos mini apartamentos familiares. Para entrar a vivir.
La idea principal es obvia: mostrar cómo por mucho que el barrio cambie, y que la gente se vaya a otros lugares, las calles son las mismas y van arraigadas a cada uno, no sólo en el plano de la ciudad. La Torrentina es algo tan característico que forma raíces en la gente, y le recuerda de dónde viene, de un barrio humilde de gente muy rica, de pequeños libros andantes que cuentan historias tristes, historias de hace tiempo, historias curiosas…
Los colores están muy re-pensados. No en vano el archivo de la portada se llama (y no es broma) Cotxera2016 – D (6) 2.psd. En la portada podemos ver como mientras las azules y viejas raíces nos aferran al barrio y a la ciudad, por la chimenea se desprende un humo fresco y alegre de gente nueva que viene al barrio. Se trata de las nuevas generaciones que vienen para quedarse. Nietos, sobrinos, hermanos de gente que ha vivido aquí toda la vida y que vienen para sentirse de nuevo en casa.
Como imagino que la mayoría de vosotros me habéis seguido el resto de trabajos, os habréis percatado del cambio tan drástico que ha dado mi estilo. Y es algo totalmente en serio. Abandoné el fondo para darle un mayor protagonismo a lo simbólico, y del retrato más o menos realista que llevaba haciendo hasta ahora, me he pasado a crear una especie de metáfora. Esta vez, he decidido ahondar en algo más simple y sencillo, y por lo tanto mucho más arriesgado.
Con tan sólo 3 colores, los principales protagonistas de la portada son la torre y la tipografía, que está tratada de forma muy diferente con respecto a lo que hacía hasta ahora. En efecto, el título de la portada está hecho a mano, y con él escrito de esa forma he querido hacer mi pequeño homenaje a esa secuencia de títulos tan maravillosa de West Side Story, de Saul Bass, donde todo se nos mostraba a través de pintadas o rayadas en las paredes del barrio marginal donde se desarrollaba la historia. Pero más allá de esta pequeña anécdota, el título nos recuerda que este barrio se ha construído mano a mano, entre todos los vecinos, cuando la gente formaba piña de verdad.
Además, lo que sepan valenciano se habrán dado cuenta de que el texto superior del Llibret está mal escrito. Por supuesto que está hecho a sabiendas. Se trata de una frase que encontré indagando y que aparecía en la portada del primer Llibret de la Falla Cotxera. Una frase que también recuperé en el Llibret de hace dos añitos. Me parece fundamental recordar de vez en cuando de dónde venimos para poder saber a dónde vamos. Y sí, es una frase típica para poner de estado en el Whatsapp, pero es totalmente cierta.